Martín Aguilar
En comisiones del Congreso de la Ciudad de México, legisladores ya analizan considerar ilícitos de porros como actos de pandilla que atenten contra terceras personas e incluso hagan daño a inmuebles, como parte de las medidas que se impulsan para evitar la evasión de la justicia por parte de esos grupos.
En entrevista, el presidente de la Comisión de Seguridad Ciudadana, el diputado morenista Nazario Norberto Sánchez explicó que el fin es fomentar un ambiente libre de violencia y del delito por parte de grupos de porros.
El legislador se refirió a la iniciativa que promueve mediante la cual se pretende adicionar dos párrafos al artículo 252 del Código Penal para la Ciudad de México, que establecen las sanciones a las que serán acreedoras las personas que pertenezcan a pandillas, asociaciones delictuosas o delincuencia organizada e infrinjan alguna acción lícita.
Delineó que por ello se reconocerán como actos de pandilla los realizados por grupos de porros dentro y fuera de las instituciones públicas y privadas de educación media superior y superior, con el fin de abatir esta brecha, escudo o escape que tienen las personas que pertenecen a esos grupos para evitar la justicia.
Expuso que su propuesta turnada a la Comisión de Administración y Procuración de Justicia del Congreso de la Ciudad de México considera como actos de porrismo aquellas amenazas, golpes, lesiones o cualquier tipo de violencia, generados hacia la comunidad escolar o fuera de esta.
Dentro del documento, se justifica la modificación porque en los medios de comunicación se ha expuesto el activismo de grupos porriles o grupos universitarios de choque y que, es un fenómeno político que por medio del pago en especie y otro tipo de prebendas es promovido indistintamente por autoridades escolares y gubernamentales, partidos políticos u organismos religiosos o empresariales.
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