La Barriada/Martín Aguilar/En sus marcas

Martín Aguilar

En el Estado de México y Coahuila, arrancó la campaña para renovar sus gobiernos el próximo 4 de junio.

 

Son dos bloques políticos los que se enfrentarán en una contienda que será de pronósticos reservados por su importancia rumbo a 2024.

 

Por la oposición encabeza la alianza el PRI en ambas entidades; por el lado gubernamental lo hace Morena, aunque dividido en Coahuila.

 

Una guerra de encuestas impulsadas desde el poder pretende influir las preferencias hacia Delfina Gómez en el Estado de México, candidata de Andrés Manuel López Obrador.

 

Sin embargo, el momento político amerita un riguroso análisis, más allá de los sondeos que se mueven al gusto del mejor postor.

 

El Estado de México, será el factor que incline la balanza en 2024, por albergar el mayor padrón de la República, incluso superior al de la Ciudad de México.

 

Pero las alertas están prendidas en Palacio Nacional respecto de esa entidad desde las pasadas elecciones de 2021.

 

Ese año Morena perdió en el Edomex, al igual que nueve alcaldías en la capital del país. En 2017 Delfina Gómez también perdió ante Alfredo del Mazo.

 

López Obrador ha tomado las riendas de la campaña de su candidata. De eso no hay duda. Las evidencias y acciones apuntan a una operación desde Palacio.

 

Por ejemplo, el 20 de febrero pasado, se reunió en Palacio Nacional con el dirigente de Morena, Mario Delgado y Horacio Duarte, coordinador de campaña de Delfina.

 

Pero, además, se difundió que también estuvieron la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum y el secretario de Gobernación, Adán Augusto López.

 

Al salir del encuentro, ambos aspirantes a suceder al presidente negaron que en el encuentro se hubiese abordado el tema del Estado de México.

 

El hecho concreto es que todos los gobernadores de Morena recibieron la instrucción de apoyar la candidatura de Gómez Álvarez.

 

El respaldo a la morenista inició desde la precampaña. Varios diputados de la Ciudad de México, enviaron a sus equipos a distintos municipios.

 

¿Si estuvieran tan seguros de lo que dicen las encuestas, por qué movilizar todo el aparato gubernamental en favor de Delfina?

 

¿El temor es por la definición de delincuente electoral al haber dispuesto ilegalmente del 10% del sueldo de empleados cuando fue alcaldesa de Texcoco?

 

Respecto a Coahuila, todo apunta al triunfo de la oposición (PRI-PAN-PRD), consecuencia de la división de Morena y aliados.

 

Ese es el panorama en las campañas que ya arrancaron. 


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