Martín Aguilar
Alrededor de medio centenar de vecinos de El Capulín bloquearon este martes los accesos a la zona de la Presa de Tacubaya e impidieron el ingreso de maquinaria, como medida de presión ante la falta de atención de las autoridades a sus demandas por los daños ocasionados por la construcción del Tren Interurbano México-Toluca.
Los inconformes señalaron que, a pesar de los compromisos asumidos por diversas instancias gubernamentales, las reparaciones a las viviendas afectadas no se han llevado a cabo, y persisten diversas afectaciones que enfrentan diariamente sin respuesta institucional.
"Lo único que queremos es diálogo y solución a los acuerdos que ya están firmados. No estamos pidiendo nada fuera de lo justo: que nos reparen los daños que la obra nos dejó", expresó uno de los vecinos que participa en el bloqueo.
Acusaron que, hasta el momento, las autoridades se han mostrado indiferentes. En lugar de atender sus reclamos, afirmaron que el personal presente en la zona niega cualquier vínculo o comunicación con representantes de la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario, encabezada por Andrés Lajous.
Los vecinos advirtieron que mantendrán las acciones de protesta hasta obtener una respuesta clara y compromisos concretos para la reparación de sus viviendas y la atención integral de las afectaciones generadas por la obra ferroviaria.
El pasado miércoles 9 de julio, los vecinos realizaron una asamblea y una protesta en la zona, en la que expresaron su indignación por la falta de respuesta a los dictámenes técnicos realizados hace más de un año, y cuya validez ha sido ignorada por las autoridades.
"¿Cómo es posible que después de tanto tiempo no haya fecha para iniciar las reparaciones? No aceptamos más simulaciones", expresaron durante la movilización, la cual fue dirigida contra funcionarios de la Secretaría de Obras y Transporte, encabezada por Andrés Lajous.
Los habitantes denunciaron que los levantamientos realizados omitieron evidencias importantes y minimizaron los daños visibles en muchas viviendas, a pesar de que en varias se observan fisuras en muros y losas que coinciden con el inicio de las obras del tren.
También cuestionaron las declaraciones de funcionarios como Pedro Bello Aguilar, quien, aseguran, ha atribuido las afectaciones a la antigüedad de las construcciones, sin considerar que muchas de las viviendas afectadas fueron edificadas recientemente.
Los vecinos advirtieron que, mientras las autoridades postergan las soluciones, los daños se agravan con la temporada de lluvias, poniendo en riesgo la integridad de alrededor de 100 familias que habitan la zona.
"Nos están dejando desprotegidos. No pueden inaugurar una obra de esa magnitud ignorando a quienes resultamos afectados. Es contradictorio que un gobierno que se dice del bienestar y que proclama 'primero los pobres' deje sin respuesta a una colonia popular como El Capulín", expresaron.
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