Fwd: Coordenadas Políticas/Martín Aguilar/Lo malo siempre sale caro

En una sociedad donde prevalece la mentira, la manipulación, la especulación y los rumores ¿quién miente?

 

¿Los poderosos que tiene a su alcance la maquinaria para fabricar comunidades sin derecho a la verdad?

 

Hoy vivimos una época en donde se le da más valor a la mentira que a la verdad. ¿Es más poderoso quién miente?

 

Los comunicadores, articulistas, columnistas y reporteros, ¿son los portadores de la verdad?

 

En realidad un informador es sólo el vehículo mediante el cual la sociedad recibe los mensajes, sobre todo del poder.

 

Pero el principal papel de los periodistas y analistas es descifras los entretelones del poder y del engaño a una sociedad.

 

Ejemplos sobran y que al final de cuentas conforman una "sociedad de la mentira" o gobiernos que tiene su soporte en la mentira, como apuntó Jonathan Swift, en su escrito "El arte de la mentira política".

 

¿Una mentira repetida mil veces, se convierte en verdad? Suele suceder en sociedades como la 4T.

 

Lo cierto es que cuando el comunicador informa la verdad, suele ser descalificado y tildado de mentiroso o calumniador.

 

Durante los últimos días se han suscitado eventos de distinta índole, donde el deporte favorito es cercenar la verdad.

 

Aquellos que suelen criticar con dureza los excesos y los abusos, son sometidos a la metralla de la descalificación y denuncias por daño moral.

 

Los ejemplos están a la vista recientemente en Puebla y Campeche; últimamente en la Ciudad de México, con el periodista Salvador García Soto.

 

Está claro que una sociedad bien informada, tomará mejores decisiones que una engañada o saturada de mentiras.

 

La ley de los programas sociales, es lo que prevalece, más allá de los excesos de Gerardo Fernández Noroña, o legisladores que usan helicóptero como transporte diario.

 

La labor del periodista siempre se ha ubicado en un oficio de riesgo, principalmente en provincia, donde prevalece la ley de la selva.

 

Crece el repudio hacia los informadores más críticos, y con el propósito de acallarlos, les son iniciadas carpetas de investigación a diestra y siniestra.

 

Un juez ordenó al periodista Jorge Luis González dejar de ser periodista. ¿Dónde se había visto esto?

 

Ni en las peores épocas de censura, se ordenó con base en la ley callar a un periodista y cerrar su medio de comunicación.

 

Lejos está una sociedad donde se respete el derecho a la verdad. 


Share on Google Plus

About .

    Blogger Comment
    Facebook Comment

0 comments:

Publicar un comentario