Rebeca Marín
Personal médico del Hospital Juárez del Centro, ubicado en la alcaldía Cuauhtémoc, denunció el deficiente manejo del nosocomio, señalando casos de corrupción, acoso, y violencia de género e institucional, motivo por el que exigen la destitución del director Antonio Reséndiz Barrón y del Administrador Francisco Navarrete Rodríguez.
En entrevista para el periódico La Prensa, integrantes del cuerpo médico señalaron que han manifestado desde hace años diversas problemáticas ante las autoridades, como la falta de materiales e insumos, los cuales han sido suplidos, en muchos casos, con recursos adquiridos por los propios trabajadores del hospital federal ubicado cerca de la Plaza de San Pablo, en la colonia Merced.
Según un documento fechado en 2023, del cual La Prensa posee una copia, el personal notificó al actual director, Antonio Reséndiz Barrón, la carencia de recursos esenciales, destacando la ausencia de equipo indispensable para brindar atención médica adecuada.
Hasta la fecha, la Secretaría de Salud no ha dado respuesta, pese a que este reporte se entrega anualmente.
Entre el equipo dañado o inexistente para realizar cirugías de corta estancia se encuentran: electrocardiógrafos, desfibriladores, endoscopios, monitores de signos vitales, unidades de anestesia, esterilizadores, camillas, microscopios, lámparas quirúrgicas, básculas y equipos de ultrasonido, entre otros.
Además, tampoco se cuentan con insumos básicos para consulta externa como termómetros y baumanómetros, acusó el personal.
"Desconocemos por qué la Secretaría de Salud no ha atendido este reporte. Así como se lo entregamos a la administración del hospital, ellos deben remitirlo a instancias superiores, ya que dependemos totalmente de las autoridades federales", afirmó el personal.
Debido a la escasez de material, el área quirúrgica ha visto limitada su capacidad operativa, lo que ha impactado en los reportes de productividad y ha generado sanciones y represalias por parte de la administración del hospital.
Adicionalmente, personal médico que solicitó el anonimato por miedo a las represalias, manifestó a esta reportera que a una especialista en ginecología le fue suspendido su día quirúrgico, lo cual, acusan, le niega el derecho al libre ejercicio de su profesión y consideran, pone en riesgo a las mujeres que acuden para la detección de diversos tipos de cáncer.
A pesar de no contar con material quirúrgico ni con un día especifico para realizar intervenciones a las pacientes, la doctora ha sido señalada por "baja productividad", lo que le ha generado aún más represalias como la negativa para tomar su periodo vacacional.
"El problema es que los pacientes siguen enfrentando carencias en su atención. Queremos brindar un servicio de calidad, pero no nos dan los medios. Los refiero al Hospital Juárez de México y ahí les dicen que solo atienden a sus propios pacientes", comentó un médico.
Ante esta situación, también los pacientes han presentado quejas por escrito, aunque no han recibido respuesta ni solución por parte de las autoridades correspondientes.
El personal ha denunciado, además, irregularidades en el proceso de basificación, alegando que se han otorgado plazas a personas que no cumplen con el perfil requerido, mientras que otros trabajadores han sido removidos por negarse a mantener relaciones personales con directivos, por lo que acusan violencia de género.
Finalmente, señalaron que las inspecciones realizadas por autoridades federales ocurren en horarios en los que no hay personal en funciones y que en ciertas ocasiones, el recorrido es realizado por personal que está supuestamente coludido con las autoridades, quienes les han prometido bases o cargos a los que solo puede accederse a través del esquema de escalafón, impidiendo conocer de primera mano las condiciones laborales y constatar las deficiencias en equipo y material.
Ante este panorama, el personal exige la destitución del director Antonio Reséndiz Barrón y del Administrador Francisco Navarrete Rodríguez, e informó que ya se ha instalado una mesa de diálogo entre representantes sindicales y autoridades federales.
Advirtieron que, si no son escuchados por la Comisión Coordinadora de Institutos Nacionales de Salud y Hospitales de Alta Especialidad (CCINSHAE), iniciarán movilizaciones hasta obtener una solución a sus demandas y atención a sus quejas que han sido interpuestas por oficio hacia las autoridades correspondientes sin que hasta el momento hayan recibido respuesta.
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