Presuntos sicarios de un grupo criminal irrumpieron en una cancha de futbol rápido de un deportivo en la Colonia Valle Gómez de la Alcaldía Cuauhtémoc y escenificaron una balacera al disparar contra los jugadores. Durante el tiroteo asesinaron a dos jóvenes; a uno de ellos lo remataron de un balazo en la cabeza.
En la escena del doble crimen, los peritos y el Ministerio Público de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México encontraron al menos 16 casquillos percutidos de arma de fuego calibres .40 y .9 milímetros, los cuales son analizados en los laboratorios de la Coordinación General de Servicios Periciales en busca de evidencias.
Por la forma en que ocurrió este doble crimen, los encargados de las investigaciones de la Fiscalía General de Justicia de la CDMX presumen que fue una agresión directa, sobre todo contra el jugador, cuyo cuerpo ya estaba tendido en el empastado y uno de los criminales se regresó y lo remató de un tiro en el cráneo.
Cometido el doble crimen los sicarios escaparon en las motos para darse a la fuga; sin embargo, uniformados de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México implementaron un operativo en una amplia zona que concluyó con la captura de uno de los presuntos implicados identificado como Rodolfo "N", de 43 años de edad, a quien escapaba a bordo de una motocicleta, así como un arma de fuego y cuatro cartuchos útiles.
Los reportes de la policía capitalina señalan que alrededor de la media noche dos equipos de futbol rápido jugaban en el deportivo conocido como Jardín Boleo, localizado en la calle de Platino entre Ferrocarril Hidalgo y Boleo, colonia Valle Gómez, Alcaldía Cuauhtémoc.
A ese lugar, llegaron tres motocicletas y se estacionaron afuera del deportivo. De éstas descendieron dos sujetos y se subieron a las gradas de la cancha para luego sacar armas de fuego y disparar contra los jugadores.
Los disparos de arma de fuego provocaron que todos corrieran en diferentes direcciones; sin embargo, uno de ellos fue alcanzado por las balas y quedó en medio de la cancha, en tanto que otro también cayó mortalmente herido fuera de la cancha, debido a que también corrió.
Los agresores también dispararon con armas de fuego contra los asistentes al partido que estaban en las gradas. El cuerpo del jugador identificado como Luis Alberto "G", de 29 años de edad, quedó tendido en medio de la cancha. En esos momentos, uno de los sicarios se acercó a éste y lo remató con un disparo en la cabeza.
El otro baleado identificado como Ángel Josua "D", quedó tendido en el asfalto fuera de la cancha, debido a que al momento de la balacera corrió para tratar de escapar; sin embargo, fue alcanzado por los proyectiles de arma de fuego.
Luego de ello, los dos agresores corrieron a las motocicletas donde los esperaban sus cómplices para luego darse a la fuga sobre la calle de Platino hacia la calzada de Guadalupe.
A la escena de la balacera acudieron socorristas de la Cruz Roja y del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas, mismos que al revisar los cuerpos de los baleados diagnosticaron que ya habían dejado de existir a consecuencia de las heridas de bala que recibieron.
Policías uniformados de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México acordonaron el lugar de la balacera, en tanto que peritos, el Ministerio Público y agentes de la Policía de Investigación de la FGJCDMX se dieron a la tarea de realizar la inspección ocular.
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