Un abuelito murió al caer y derrapar la motocicleta que conducía y le pasaron encima las llantas de un tráiler, cuyo conductor no pudo frenar. Su nieto, a quien llevaba a la escuela, se salvó de manera milagrosa, pues al caer del potro de acero se levantó rápidamente y así evitó que el tractocamión también lo arrollara.
La hora de entrada al colegio para un niño la marcaban las 7:00 de mañana, él y su abuelo salieron de prisa de casa rumbo al colegio a bordo de una motocicleta. Pero nunca llegaría el menor a clases, ni su abuelo de 56 años de edad de vuelta a casa, pues fueron embestidos por un tráiler, causando que derraparan en calles de la colonia Chinampac de Juárez en la alcaldía Iztapalapa, donde el adulto murió atropellado por la pesada unidad que se dio a la fuga pero fue detenido metros más adelante por policías capitalinos. El menor afortunadamente resultó ileso pese a la caída del potro de acero.
A primeras horas del jueves un abuelito circulaba a bordo de una moto negra Italika por Eje 5 Sur casi al cruce con Cadena Azul, en compañía de su nieto de 16 años a quien llevaba a su escuela a tomar sus clases presenciales; de pronto, al llegar justo a la altura del mercado, el chófer de un tráiler blanco los impactó por lo que el adulto mayor perdió el control de la unidad haciendo que derraparan y cayeran contra el pavimento.
Tras el accidente, el joven de 16 años de edad se paró rápidamente, pero su abuelo quien no tenía la misma habilidad se quedó recostado en piso justo al paso de las llantas del tráiler, el cual no pudo detenerse a tiempo pasando las ruedas de la pesada unidad sobre el hombre. El chófer de la unidad huyó a toda velocidad del sitio sin detenerse a auxiliar a la víctima.
Al lugar de los hechos se dio una movilización de los cuerpos de emergencia, elementos de la Secretaria de Seguridad Ciudadana (SSC) sector Santa Cruz acordonaron la zona mientras socorristas del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM) revisaban al menor quien se encontraba asustado, tras estabilizar fue trasladado a un hospital para su atención, cuando se acercaron a su abuelito solo pudieron confirmar la ausencia de signos vitales, pues el camión que lo arrolló hizo que sus vísceras explotarán arrebatándole la vida.
El acordonamiento causó que la circulación se viera afectada, hasta el lugar regreso el menor mientras observaba con tristeza y con llanto a los peritos de la fiscalía realizar las diligencias correspondientes para luego trasladar el cadáver a la Agencia del Ministerio Publico de Iztapalapa 6.
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