EU presenta un plan para combatir la crisis migratoria en la Cumbre de las Américas

Martín Aguilar

 

Estados Unidos presentó el viernes una larga lista de medidas para hacer frente a la crisis migratoria, mientras el presidente Joe Biden y sus colegas se preparaban para emitir una declaración conjunta elaborada en una tensa Cumbre de las Américas.

 

En el último día de la cumbre, la Casa Blanca promovió una serie de programas de migración acordados por países de todo el hemisferio y por España, que asistió como observador. Sin embargo, algunos analistas se muestran escépticos de que los compromisos sean lo suficientemente significativos como para marcar una diferencia importante.

 

Las medidas incluyen que Estados Unidos y Canadá acojan a más trabajadores temporales, proporcionen vías para que las personas de los países más pobres trabajen en los más ricos y ofrezcan mayor protección a los inmigrantes.

 

'Estamos transformando nuestro enfoque para gestionar la migración en las Américas', dijo Biden. 'Cada uno de nosotros está firmando compromisos que reconocen los desafíos que todos compartimos".

 

Las banderas de 20 países, varios menos que el número de asistentes a la cumbre en total, engalanaron el escenario donde Biden encabezó el despliegue. Pero incluso ese número sólo se consiguió tras días de presión y persuasión por parte de Estados Unidos.

 

La Declaración de los Ángeles que aplica el principio de responsabilidad compartida para una migración 'ordenada', como reclama Joe Biden, pero que se queda en algo simbólico frente a la amplitud del problema.

 

El presidente estadounidense defendió esta semana en Los Ángeles 'una migración segura y ordenada' como posible catalizador para el crecimiento sostenible, pero insistió en que la migración irregular es 'inaceptable' y su gestión debe compartirse.

 

El término clave para Biden es responsabilidad compartida, debido a que Estados Unidos no quiere cargar con todo el peso del flujo migratorio. Y aún menos a pocos meses de las elecciones de medio mandato de noviembre, en momentos en que la alta inflación hace caer su indice de aprobación entre la opinión pública.

 

El gobierno de Biden, que se enfrenta a un flujo récord de migrantes ilegales en su frontera sur, prometió cientos de millones de dólares en ayuda para los migrantes venezolanos en la región, renovará la tramitación de visados familiares para cubanos y haitianos y facilitará la contratación de trabajadores centroamericanos.

 

El pacto liderado por Estados Unidos tiene como objetivo es crear incentivos para los países que acogen a un gran número de migrantes y repartir la responsabilidad por toda la región.

 

La declaración, que será presentada por Biden y otros líderes en una ceremonia el viernes, 'busca movilizar a toda la región en torno a acciones audaces que transformarán nuestro enfoque para gestionar la migración en las Américas', dijo la Casa Blanca.

 

Estados Unidos acogerá a 20,000 refugiados de América Latina en 2023 y 2024 (tres veces más que este año) y desembolsará 314 millones de dólares en ayuda para migrantes en la región. Son muchos menos que los 100,000 ucranianos que Estados Unidos se dispone a recibir después de que Rusia invadiera su país.

 

Unos 7,500 migrantes irregulares, en su mayoría de Centroamérica, pero también de Cuba, Nicaragua Venezuela y Haití, intentan cruzar a diario la frontera con Estados Unidos, según datos oficiales del mes de abril. 


Share on Google Plus

About .

    Blogger Comment
    Facebook Comment

0 comments:

Publicar un comentario